Redacción
El Directorio Ejecutivo del Banco Mundial aprobó un préstamo «para políticas de desarrollo» por valor de US$150 millones destinado a Panamá, así lo informó el organismo en un comunicado de prensa.
En el mismo documento explican que estos fondos contribuirán a promover un crecimiento sostenible y con bajas emisiones de carbono y, al mismo tiempo, a generar mayor resiliencia climática y una mejor gestión climática, ambos aspectos esenciales para una mayor inclusión y promover el crecimiento sostenible en beneficio de los panameños, especialmente, los que viven en condiciones de vulnerabilidad.
El préstamo para políticas de desarrollo se diseñó en torno a dos pilares el primero consiste en apoyar reformas para lograr la transición energética y el crecimiento socialmente inclusivo con bajas emisiones de carbono.
Mientras que el segundo es para establecer las bases normativas para sostener el capital natural en favor de un crecimiento resiliente.
El Banco Mundial indica que este es el primer préstamo de una serie programática de dos operaciones para políticas de desarrollo que tiene como objetivo apoyar el crecimiento verde, la resiliencia y un modelo de desarrollo inclusivo en el país.
«Con esta operación se respaldarán medidas para categorizar el gasto público mediante etiquetas sobre cambio climático con el fin de mejorar su eficiencia y fortalecer la capacidad institucional para incorporar criterios de mitigación y adaptación al cambio climático en la gestión, el presupuesto y el gasto. Además, con este proyecto se respaldan la descarbonización del transporte terrestre, los avances en la implementación de políticas de eficiencia energética, la conversación de los bosques y la protección de los océanos.
La iniciativa busca incrementar la resiliencia del países frente al cambio climático y proteger su capital natural respaldando una mejor gestión forestal y políticas de protección de las cuencas hidrográficas. También alentará la adopción de parámetros de eficiencia energética más exigentes. Por último, con la operación se respaldará la aplicación de políticas con perspectiva de género en las áreas de electrificación rural, energía renovable y conectividad digital, convirtiendo a Panamá en un modelo dentro de los países de América Central y de la región.
“Panamá posee un enorme capital natural que, junto con su diversidad social y cultural y su ubicación geográfica, ofrece grandes oportunidades para promover un desarrollo económico integrado, inclusivo y ambientalmente sostenible”, señaló Michel Kerf, director del Banco Mundial para América Central y la República Dominicana.
Agregó que esta nueva operación ayudará al país a avanzar hacia su objetivo de construir una economía más inclusiva y resiliente en beneficio de todas y todos los panameño.
Por su parte, Héctor Alexander, ministro de Economía y Finanzas, dijo que “esta operación financiera permitirá redoblar los esfuerzos que lleva adelante Panamá para establecer las bases normativas que propicien un crecimiento económico sostenible, con bajo nivel de emisiones y resiliencia frente al cambio climático. También ubica a Panamá como uno de los países que promueven la transición hacia energías limpias, el crecimiento socialmente inclusivo y con bajas emisiones de carbono, y la innovación tecnológica para responder mejor a las emergencias climáticas.
Destacó también que Panamá apoya los esfuerzos dirigidos a sostener el capital natural en favor de un crecimiento resiliente fortaleciendo la gestión climática y mejorando la capacidad institucional para avanzar con su programa de mitigación y adaptación al cambio climático.
Indicaron además que se espera que las reformas de políticas incluidas en el proyecto generen resultados alrededor del 2025, entre los resultados esperados están el de mantener la posición de Panamá como país carbono neutro, ampliar el acceso a la energía y los servicios de Internet en regiones remotas y fortalecer el control de la deforestación en los manglares.