Alma Solís
La buena capitalización del Banco Nacional, sumando a las fortalezas financieras producto de estructura de pasivos con una base de depósito de bajo costo del gobierno fueron algunos de los puntos que la calificadora de riesgo Fitch Ratings se basó para afirmar la calificación internacional de riesgo emisor (IDR) de la entidad a Largo Plazo en ´BBB-´, con Perspectiva Estable; así como también afirmó la calificación local de Largo Plazo en ´AAA(pan)´, con Perspectiva Estable.
De acuerdo con la empresa, una de las fortalezas financieras del banco proviene de la estructura de pasivos con una base de depósito de bajo costo del gobierno. En términos de liquidez, el banco tiene una métrica sólida de 39.5% de préstamos a depósitos (en comparación con la mayoría de los pares locales e internacionales), y sus activos líquidos cubren 81.8% de los depósitos totales.
Mientras que la capitalización de Banconal con un capital común de nivel 1 (CET 1; common equity tier 1) de 17.5% a marzo de 2022. Los índices de capital también se han beneficiado de una proporción mayor de activos líquidos con menor densidad de riesgo. Las perspectivas de capital siguen siendo, de mantenerse altas, cercanas a 17% durante el horizonte de calificación.
Las calificaciones IDR, GSR y en escala nacional se sustentan en el soporte potencial que Banconal recibiría de la República de Panamá (BBB- Perspectiva Estable), si fuera necesario. La opinión de soporte de Fitch está altamente influenciada por la garantía estatal subsidiaria general para todos los pasivos establecidas en la Ley Orgánica de Banconal (artículo 3).
En opinión de Fitch, Banco Nacional de Panamá cumple con un rol no oficial de prestamista de última instancia en el país, lo que ha sido evidente en diferentes momentos de la historia de estrés, ya que el banco ha sido receptor de fondos de contingencia para inyectar liquidez al sistema.
El informe además destacó el modelo de negocio de la institución el cual se define por sus múltiples roles, por un lado, es un banco universal propiedad del Gobierno y, por otro lado, un tesorero del Estado. Esto le permite al Banco Nacional de Panamá tener acceso a fondos públicos, lo que da como resultado el portafolio de liquidez más grande de Panamá. Cabe destacar que su calidad de activos está definida por activos de riesgo bajo, que le permite mantener una rentabilidad buena y un capital sólido.