Alma Solís
El presidente de Panamá, Laurentino Cortizo, sancionó la ley que extiende la vigencia del Interés preferencial en Panamá, un hecho que fue aplaudido por las promotoras de vivienda y la Cámara Panameña de la Construcción (Capac), pero otra parte de la ecuación que son los bancos, no están tan felices con esta nueva ley, debido a la deuda por más de US$600 millones que se mantiene con las entidades financieras producto de este subsidio.
Raúl Guizado presidente de la Asociación Bancaria de Panamá (ABP) calificó como “incosteable” esta ley.
“El tema aquí es que tenemos una ley incosteable, y que se puede convertir en incumplible porque acabamos de aprobar una ley sabiendo que hay más de US$600 millones adeudados a los bancos y lo que se ha hecho es ampliar hasta el 2025 la ley de interés preferencial, ósea que se van a seguir acumulando probablemente al menos que nos pagarán” dijo Guizado.
Cuando se están analizando la extensión de la Ley, la recomendación de los bancos fue que se limitara el tope.
“Nuestra recomendación como Asociación Bancaria de Panamá al Ejecutivo fue que limitaron el tope de los subsidios porque en lo particular no consideramos una residencia de interés social, digamos, por ejemplo, un apartamento tipo de «efficiency», de 150,000 o de 180,000 ubicado en una zona céntrica de la ciudad eso yo no le veo que sea interés social y por ende no debiera ser subsidiado” indicó el banquero.
Para entender un poco como funciona la ley de interés preferencial en Panamá es que cuando se adquiere una hipoteca, para mantener una tasa más baja el Estado se hace responsable de una parte de esta y la persona otra. El banco trimestralmente presenta la cuenta a la Dirección General de Ingresos para convertirlos en créditos fiscales que pueden redimir cuando presentan sus declaraciones de impuestos o venderlos a otras empresas. Sin embargo, cuando el banco va a hacer uso de esos créditos fiscales, no se les permite utilizarlo a totalidad.
“A los bancos nos adeuda el Estado más de US$600 millones en reconocimiento de crédito fiscal y tenemos años de no cobrar esos créditos fiscales. Algunos han sido ya autorizados hasta por resolución del Ministerio de Economía y Finanzas
La explicación que reciben es que este subsidio no forma parte del presupuesto.
“Lo que se comenta es cierto a mí entender y hemos tenido reuniones con el ministro de Economía y Finanzas, desde hace más de un año, con relación a este tema. Lo que entiendo es que esto no forma parte del presupuesto nacional del Estado y el Estado sin duda que ha tenido una serie de subsidios en los últimos años, producto de la crisis de causada por la pandemia, como por ejemplo, el bono solidario o que se le da a la gasolina, osea, que están ayudando a la población de alguna manera y han puesto en segundo plano a los bancos» dijo.
Pero esta situación es mucho antes de la pandemia, cuando el gobierno de Nito Cortizo llegó en el 2019 hizo y adelantó y pagó créditos fiscales que venían de gobiernos anteriores y que estaban atrasados.
Guizado dijo que han propuesto diferentes mecanismos para conseguir los fondos, incluyendo la sugerencia de que el Estado haga una emisión de bonos por los US$600 millones, pero aún no hay nada concreto.
Bancos se están retirando
Como es conocido, ya algunos bancos de la localidad están perdiendo el apetito por este segmento del mercado. Incluso la Asociación Bancaria de Panamá ha comentado que algunas entidades han confirmado que se van a salir de financiar hipotecas con interés preferencial o disminuir su participación. O solo están dando las hipotecas a aquellos promotores que sean clientes de créditos interinos para la construcción de ese mismo banco.
Otro de los puntos es que ante esta situación sean los bancos del Estado, Caja de Ahorros y Banco Nacional los que estén absorbiendo estos préstamos.